Aún estoy intentando resignificar mi experiencia con vos. Fue tan sublime y a la vez tan abrumadora.
Tu grandeza desborda mis sentidos y sobrepasa mi capacidad de asimilación.
Intento ansiosamente recuperar recuerdos que me regocigen, que me convenzan que estuvimos, que te observé y contemplé; detalladamente analizo nuestras fotos para evidenciar lo que mi mente le cuesta procesar.
Encuentro contradicción ¿Y qué? Gracias por ayudarme a comprender el término: aceptación.
Conservo conmigo las risas, elogios y caricias que me regalaste en el camino, dignos de tu belleza.